En el Museo de Arte Moderno de Santo Domingo: Fotografía y video
Marlen Vásquez: Sin título, fotografía digital,
64x95cms. 2005.
Este martes 29 de agosto, a partir de las 7:30 p.m., la Secretaría de Estado de Cultura y el Museo de Arte Moderno dejarán clausurada la exposición “El Juego De la Diferencia: Penúltima Imagen de la Fotografía y el Video en Santo Domingo”. Se trata de una muestra concebida originalmente como proyecto itinerante por distintas ciudades de Europa, el Caribe, América Latina y los Estados Unidos para el próximo año 2007 y a la cual hemos estado dando apoyo curatorial durante últimos cinco meses junto a la directora, María Elena Ditrén, y la Dra. Laura Gil Fiallo.
Esta es la primera exposición con carácter itinerante a nivel internacional curada y coordinada por el Museo de Arte Moderno. Como original encargo-entrega “oficial” el mismo también se nos revela apropiado para reconocer el compromiso de la actual dirección del MAM con la proyección internacional de las manifestaciones artísticas dominicanas contemporáneas más representativas.
Tal como ya hemos advertido: los filamentos de la luz tendrían que “penetrar” bastante la instantánea materialidad y los fértiles abismos que “frisan” los efectos de la imaginación para advertir “El Juego de la Diferencia”: diversidad de poeticas, multiplicidad de prácticas simbólicas o visiones “espectrológicas” que definirían la penúltima imágen de la fotografía y el video en Santo Domingo.
En el panorama de la fotografía artística dominicana contemporánea se registra tal vastedad de producción y convicciones estéticas que hasta nos gastamos el lujo de tener en plena vigencia a reconocidos profesionales que persisten desafiando sus propios ciclos “biológico-creativos” como taumaturgos de la imagen manierista a través del dispositivo tecnológico.
Esto es cifra de cristal en artistas como Domingo Batista, Luis Nova y su notable “legión” de seguidores. Desde Luego, aquí se admiten los auténticos aciertos creativos, así como el reconocimiento y el respeto que durante las décadas de los 80 y 90 del siglo XX obtienen nuestros más importantes artistas del lente en el plano internacional.
Producciones y trayectorias fundamentales como las de Wilfredo García, Martín López, Mariano Hernández, Faustino Pérez, Polibio Díaz, Miguel Cruz, entre otros y otras no menos respetables, son claves a la hora de confrontar la pluralidad de opciones imaginativas, la manipulación del los recursos tecnológicos y la misma singularidad discursiva.
Pero, resulta igualmente revelador el hecho de que sea, precisamente, en los 90s, cuando se advierte mayor profundidad en la implicación de las mujeres en la deconstrucción visual de su realidad sociocultural, de su universo íntimo, de su corporeidad, de sus circunstancias cotidianas y de sus otredades existenciales a través de la imagen fotográfica.
Los defectos y efectos de tal implicación resultan en un “Juego de la Diferencia”. Así, la hiperactiva y notable participación de las mujeres artistas también incide considerablemente en la riqueza, el esplendor y la diversidad de poéticas que vitalizan el video y la fotografía artística contemporánea en el Santo Domingo de estos poscriticos y efímeros umbrales del tercer milenio.
El Gran Premio de la XXll Bienal Nacional de Artes Visuales (2003) a “Otra Presidente por favor”, del reconocido artista multimedia Martín López, reafirma el estado saludable de la fotografía artística dominicana contemporánea. Pero, la gran sorpresa de la XXlll Bienal Nacional de Artes Visuales (2005) fue la concesión del Gran Premio a “Ni aquí ni allá”/“Ñaque” y “Miedo”, video tríptico de Ignacio Alcántara. Alcántara encabeza este selecto grupo de artistas cuya práctica y producción exponen y sostienen “El Juego de la Diferencia”.
Los expositores del la penúltima fotografía dominicana son: Fausto Ortiz, Miriam Calzada, Aquiles Azar Billini, Raquel Paiewonsky, Patricia Pou Henríquez, Mónika Pimentel Imbert, Sacha De Lemos, Lorena Espinoza, Marlen Vásquez, Evelyn Espaillat, mientras que los videocreadores seleccionados son Limber Vilorio, Juan Dicent, Pascal Meccariello, Mónica Ferreras, Ney Díazh, Elia Alba, Ignacio Alcántara y Patricia Castillo.
Como exposición colectiva, “El Juego de la Diferencia” se estructura a partir de un atento seguimiento a la participación de cada uno de los artistas seleccionados en una serie de hechos, exposiciones y eventos que resultan cruciales para el desarrollo de la visualidad del último lustro en Santo Domingo, tales como la exposición “Retrato de Santiago”, del Grupo Fotográfico de Santiago (GRUFOS), en el Centro Cultural de España(1997), la exposición colectiva “Impresiones”, del Grupo “Imagen 83”, en la Alianza Francesa de Santo Domingo(2000), las últimas tres ediciones del Concurso Eduardo Leon Jiménes(1998-2004), la celebración de “Arte Barceló/Nuevas Propuestas”(2003, 2004 y 2006), la muestra colectiva “Consecuencias”, del grupo “Circuíto Fotográfico”, en el Museo de Arte Moderno (2004) y las últimas tres ediciones de la Bienal Nacional de Artes Visuales (1999-2005).
Para Laura Gil Fiallo esta exposición:” ejemplifica la enorme variedad que ha adquirido la producción artística (fotográfica) en la última década, con diferentes expresiones de la cotidianidad y de las mitologías que de manera más o menos implícita están presentes en sus diferentes aspectos: problemas urbanos, problemática de género, visiones del mundo, choque cultural, etc.”
Amable López Meléndez
Hoy/Areito/Santo Domingo
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